Lo primero que tenemos que hacer es definir con claridad y exactitud lo que es una pizarra blanca. Y es que, en esencia, una pizarra blanca no es otra cosa que un soporte en el que se puede escribir como si de una pizarra se tratase. La particularidad que tiene, como su propio nombre indica, es que está hecha de un material blanco sobre el que solo se puede escribir con un tipo de rotuladores concreto. Además, del mismo modo, solo se puede borrar con un tipo de borrador concreto. Sin embargo, son muchos los motivos, como vamos a ver ahora mismo, los que la hacen un fijo en muchas oficinas y centros de enseñanza.
La primera gran ventaja que podemos ver con las pizarras de este tipo es que son muy versátiles. Con esto lo que queremos decir es que sirven para muchas cosas y se pueden incorporar en cualquier escenario. De hecho dentro de una reunión en la que la tecnología fuera la clave, una pizarra de este tipo no desentona en absoluto. Es un lugar perfecto para poder escribir anotaciones, borrarlas y volverlas a escribir con total comodidad.
Por otro lado tenemos que decir que este tipo de soporte que nos ocupa hoy se puede comprar en infinidad de sitios. Y no solo nos estamos refiriendo a lugares físicos sino también a lugares virtuales como puede ser el caso de www.pizarras-blancas.es. Esto lo que hace es que cualquier persona, o empresa, que necesite una pizarra blanca, la va a poder encontrar sin ninguna dificultad. Siempre podrá encontrar el tamaño, el material y las especificaciones que busca. Y lo mejor de todo es que cada vez son más los proveedores los que se ocupan de fabricarlas.
Para terminar, y como no podía ser de otro modo, el precio es otra de las ventajas con las que nos podemos encontrar. El precio, si bien es cierto que puede variar en función del proveedor, del material y de las dimensiones no es menos cierto que por norma general este va a ser muy ajustado. Pero eso no es todo ya que incluso el material que hay que adquirir para utilizar la pizarra, rotuladores y borrador, también es barato. Y lo mejor de todo es que una pizarra blanca no va a desentonar en una sala en la que los ordenadores y las tabletas son las protagonistas de la reunión.