A diferencia de muchos otros idiomas, el inglés es más fácil de aprender, sobre todo porque muchas personas manejas un porcentaje, sea pequeño o grande, de su vocabulario a diario, lo que hace posible hablar inglés en tiempo récord.
El inglés suele tener una estructura fácil de aprender y no es muy complejo en su pronunciación, una vez se saben las normas de pronunciación y gramática, así como la conjugación de los verbos, decir frases en ingles será muy sencillo.